En los árboles y arbustos ornamentales del colegio podríamos encontrarnos a un gusano de pollo, que por su color amarillo es muy llamativo. ¡Pero ten cuidado!, es un experto tira flechas. Si lo ves en un pasillo, aléjate e infórmale de inmediato a un adulto responsable para trasladarlo a un lugar seguro.
Esta oruga es considerada como un insecto peligroso debido a sus espinas venenosas que son utilizadas como mecanismo de defensa ante los depredadores. En contacto con la piel puede ocasionar reacciones como quemazón, ronchas, enrojecimiento, hinchazón, náuseas, sangrado en la zona afectada, entre otros síntomas.
Ciclo de vida
Este insecto tiene metamorfosis completa, pasando por cuatro estados a lo largo de toda su vida: huevo, larva, pupa o crisálida y adulto.
Huevos:
La hembra usualmente se reproduce depositando sus huevos durante dos noches seguidas, que oculta en el follaje de las plantas o en pequeñas ramas.
Larva u oruga:
Las larvas deambulan desde la planta huésped hacia otras especies que se encuentran cerca. Una vez maduras, las orugas comienzan a girar sus capullos. Esto lo hace construyendo un delgado marco de seda, para lo cual utiliza su cubierta de cerdas como soporte.
Pupas:
Las larvas empupan aproximadamente 16 días después de haber completado el capullo. En el momento cuando el pre adulto se encuentra casi fuera del capullo, se divide el exoesqueleto pupal y emerge.
Adulto:
La polilla adulta está cubierta por un pelaje largo en colores que van desde el naranja apagado hasta el amarillo limón, con patas peludas y negras vellosas.
Importancia ecológica:
En general las polillas cumplen la función de polinizar flores y son alimento para una serie de animales, entre los que se incluyen varias especies de aves que consumen polillas adultas y alimentan a sus pichones con sus larvas.
¡Preserva su vida!
Por: Alejandra Becerra Gómez